En La Atalaya de 15 de Octubre del 2009, los Testigos hablan de una “Trinidad amical” ideal que existe entre los Testigos de Jehová…
Si alguien pudiera subyugar a uno solo, dos juntos podrían mantenerse firmes contra él. Y una cuerda triple no puede ser rota en dos pronto (Ecl. 4:12).
Las amistades más sólidas se basan en el amor a Jehová. Para que una amistad perdure, Jehová debe ser la tercera hebra de esa cuerda. Es cierto que quienes no aman a Jehová también pueden tener buenas amistades. Pero cuando el factor que une a dos personas es el amor a Dios, se consigue una amistad inquebrantable. Por ejemplo, cuando se producen desacuerdos, saben resolverlos de una manera cristiana. Y cuando los enemigos de Dios tratan de separarlos, su amistad les permite resistir y seguir unidos. A lo largo de la historia, los siervos de Jehová han demostrado que nunca traicionarán a sus hermanos, aunque eso les cueste la vida (1 Juan 3:16). Sin duda, las amistades más enriquecedoras que podemos tener son con las personas que aman a Jehová. WT 09 15/10 4:3-5
Comentario:
Sin duda alguna hay una perfecta “Trinidad amical” cuando dos amigos tienen a un Tercer amigo en común, que en este caso es Yahweh (Jehová) mismo. Esta amistad tripartita es inquebrantable, y se sostiene perfectamente porque Dios está en medio de los tres. Así que amando a Dios, podemos mantener esa amistad “Trina” inamovible e inmutable.
Sin embargo, esta “Trinidad amical” no se mantiene incólume dentro de los Testigos de Jehová. Y es que cuando uno de los amigos que tiene a Yahweh como un amigo en común decide que no va a seguir soportando una enseñanza falsa del “esclavo”, inmediatamente el otro amigo se le viene encima, y en un santiamén se convierte en su enemigo; y para colmo de los colmos, Yahweh mismo también lo repudiará de Su relación amical inquebrantable y de Su “organización”.
Desgraciadamente los Testigos de Jehová consideran que amar a Jehová es mantenerse en la secta Watchtoweriana, y que salirse de ella es perder el favor y la amistad de Jehová.
Pero seamos honestos, amigos: ¿Acaso un hombre que repudia las mentiras de esta secta Watchtoweriana se convierte automáticamente en un enemigo y desamorado de Yahweh? ¿Acaso han dejado de amar a Jehová aquellos exmiembros de la secta que han sido expulsados injustamente bajo el cargo de apostasía?¿Acaso merecemos que nos saquen del círculo amical simplemente porque hemos dejado de creer en ciertas interpretaciones absurdas o completamente erróneas de la WT?
Yo, apologista, fui expulsado de la organización de los Testigos de Jehová porque me rehúse a seguir creyendo en sus mentiras doctrinales. ¿Pero acaso dejé de amar a Jehová después de mi expulsión injusta como si fuera un “apóstata” y renegado? Pues, NO!!!—Y supongo que ustedes han notado que aún mantengo mi compromiso para con Jehová y para con su mensaje del reino, el cual aún defiendo y propago desde que creí en Su Palabra de todo corazón. Sin embargo, los que eran mis amigos en la secta se hicieron humo, desaparecieron, y ya ni me miran. ¡Pobrecitos! Simplemente están engañados y manejados por una secta que practica un férreo ostracismo, típico de los cultos más peligrosos y manipuladores que puedan existir. Es por eso que siento una sincera conmiseración por todos los Testigos de Jehová, y más aún, por mis detractores más furibundos y fanáticos que han perdido la libertad, y en cierto modo, la razón misma.
Apologista